Primer Paso en el tratamiento de pacientes con enfermedad de cáncer
Para entender realmente cuál es el alcance del cáncer como enfermedad hay que tener en cuenta que existe un cuadro cancerínico en actividad que merece ser tratado en las personas que:
– están cursando un cáncer que ya ha sido diagnosticado.
– poseen fuertes antecedentes genéticos de cáncer, en razón de que sus familiares directos (padres, abuelos, hermanos) han tenido la enfermedad.
– están presentando síntomas mentales o físicos de impregnación cancerínica, es decir, posibilidades ciertas de que la enfermedad se presente en un futuro.
Los síntomas mentales y físicos que pueden presentarse en cualquiera de los tres tipos pacientes referidos son:
Mentales: el síntoma capital está constituído por ideas o preocupaciones obsesivas por detalles mínimos; temor de tener un cáncer en alguna parte del cuerpo; la tristeza y la preocupación por la salud.
Físicos: adelgazamiento, sin motivo aparente; hipertensión arterial con labios cianóticos y varicosidades visibles en la nariz y en la cara; anemia, dolores indefinidos e intermitentes, cansancio marcado, desproporcionado para el esfuerzo realizado; falta de energía progresiva.
El tratamiento que corresponde implementar ante esta enfermedad consiste en tratar el terreno cancerínico en actividad mediante dósis homeopáticas que favorecen una mejor respuesta a los tratamientos en medicina alternativa instituídos y mejoran la calidad de vida y recuperación del paciente.